«¿Tú no sabes que Dios está prohibido?» Así de sencillo y así de complicado. "Dios está prohibido" por orden del comité revolucionario. Es como intentar prohibir al mar que tenga olas o al cielo que tenga estrellas. El hombre tiene a Dios y Dios al hombre. Y ante esta voz de condena y de privación responden los mártires claretianos de Barbastro con su himno: «Y ¿qué ideal? Por Ti, Rey mío, la sangre dar».
Gracias a Dios, películas como "Un Dios Prohibido" están reflejando con rigor histórico y verdad lo que sucedió en España durante la Guerra Civil, la etapa más cruenta de la historia española. Y lo hace, no sólo con verdad y rigor histórico, sino con belleza, con amor, con plasticidad.
En "Un Dios Prohibido" no es protagonista la Guerra, ni se hace con afán revanchista, ni está movida por el odio y ni siquiera por el deseo de justicia. El protagonista de esta historia verídica es el amor de unos jóvenes seminaristas y sacerdotes por Dios y por las almas.
Dirigida por Pablo Moreno (Alba y Pablo de Tarso) y protagonizada por Jacobo Muñoz, Íñigo Etayo y Elena Furiase, entre otros, revive los últimos momentos de los 51 seminaritas y sacerdotes claretianos que dieron su vida por Cristo y por la Iglesia en Barbastro en el verano de 1936.
Cuando uno se dispone a ver una película española sobre la Guerra Civil piensa en seguida en una visión tendenciosa, política, atea y anticlerical. Esto ocurre porque abundan los ejemplos de este tipo de cine español sobre la Guerra o la Post-guerra (baste señalar aquí como ejemplos Libertarias de Vicente Aranda en 1996, Las Trece Rosas de Emilio Martínez Lázaro en 2007, Los Girasoles Ciegos de José Luís Cuerda en 2008, o en otro ámbito La Mala Educación de Pedro Almodóvar en 2004). Sin embargo, esta cinta es novedosa dentro del panorama del cine español actual, ya que muestra otra visión de los hechos, alejada de la política y como homenaje al amor por la religión. Este amor, que es el protagonista, se manifiesta incluso en el amor a los enemigos y en el perdón sincero de las víctimas hacia los verdugos.
- Porque está muy bien dirigida, muy bien grabada y muy bien interpretada.
- Porque es necesario, en un clima laicista y anti-Iglesia, dar una visión histórica distinta de la que nos tienen acostumbrados.
- Porque deja en todos los que la ven un poso de amor a la Iglesia, de paz, de perdón.
- Porque habla sin tapujos de las atrocidades cometidas durante la Guerra Civil contra los católicos por el mero hecho de serlo.
- Porque la historia es contada sin artificios, siendo rigurosamente histórica:
- Así trataron a los sacerdotes y seminaristas claretianos.
- Así castraron al obispo de Barbastro, don Florentino Asensio Barroso.
- Así introdujeron prostitutas en el salón para intentar hacer caer a los jóvenes seminaristas.
- Así se enamoró Trini La Pallaresa de uno de los seminaristas, y así evitaron dicho seminarista y sus compañeros sus seducciones.
- Así rescataron milagrosamente la co-munión del Sagrario de la comunidad, mientras los milicianos registraban en busca de armas.
- Así escribieron los claretianos sus últimos mensajes en hojas, sillas, etcé-tera. Mensajes de amor y de perdón
- Así fueron muriendo uno tras otro los 51, animándose mutuamente a permanecer fieles al amor de Cristo.
- Así salvaron sus vidas para dar testimonio de lo ocurrido los dos seminaristas argentinos y el cocinero.
FICHA TÉCNICA
Título Original: Un Dios Prohibido
Año: 2013
Duración: 113 min.
País: España
Director: Pablo Moreno
Guión: Juanjo Díaz Polo
Música: Sergio Cardoso
Fotografía: Rubén D. Ortega
Reparto: Jacobo Muñoz, Íñigo Etayo, elena furiase, Jerónimo Salas, Alex Larumbe, Luís Seguí, Gabriel González, Jesús Guzmán, Mauro Muñiz.
Productora: Contracorriente Producciones
Género: Histórico. Drama. Guerra Civil Española. Religión.
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