nº 3, sección dirigida por Irene Martínez, profesora
(con la colaboración de Paloma Niño)
Mario Joseph, nacido en la India, es un musulmán convertido al cristianismo
Tras la lectura de su libro, “Encontré a Cristo en el Corán”, miles de musulmanes se han convertido al cristianismo y algo más de 100 se han bautizado.
1. ¿Cómo fue su infancia?
Nací en el seno de una familia musulmana en la región de Kerala, en la India. Soy el tercero de 6 hermanos. Mi madre, estando yo en su vientre, tuvo una infección bastante grave, los médicos le dijeron que me iba a perder aconsejándole que abortara. Mi madre es una mujer creyente y ante esta situación oró a Alá con gran fe, diciéndole que si me salvaba me entregaría a él. Sobreviví a aquella infección y mi madre cumplió su promesa llevándome a la escuela árabe y no a la escuela normal como cualquier otro niño.
2. No fuiste a la escuela normal pero sí a la escuela árabe, ¿en qué consiste esta escuela?
Cuando tenía 4 años mis padres me mandaban a la mezquita para que estudiara el Corán y nuestro catecismo. Allí estaba desde las 7 hasta las 10 de la mañana, aprendiendo a leer el Corán, a escribir, leer y entender el árabe en esta edad tan temprana.
3. ¿En qué consiste ser imán?
Es la persona que lidera una mezquita, el pastor de ella. Se encarga de llevar a la gente al islam, a que realicen las 5 oraciones diarias,… celebra bodas, funerales… como haría un sacerdote católico.
4. Y precisamente en este trabajo hubo un día que pasó algo especial, ¿Qué ocurrió cuando predicaba?
Un día predicaba en la mezquita el islam y entre otras muchas cosas también decía que Jesús no era Dios. Aquel día un hombre, que me estaba escuchando entre el público, vino hacia mí y me preguntó que quién era Jesús. No supe responder, pero aquella pregunta me sirvió para pensar en la figura de Jesús. Necesitaba encontrar una respuesta y empecé a investigar en el Corán, a estudiarlo,… Entonces fue cuando me di cuenta de que el nombre de Alá aparecía 4 veces y el de Jesús 25. También me di cuenta de que en el Corán no aparece el nombre de ninguna mujer, solamente el de la Virgen María que aparece 34 veces, y el capítulo 19 nos habla de María y el capítulo 3 de la familia de María.
El Corán dice que Jesucristo es “la Palabra y Espíritu de Dios”, que “la Palabra existía en el principio y esa palabra es Jesucristo”. Estaba confundido… según el Corán Jesucristo está vivo y va a volver, en cambio, Mahoma no está vivo y no va a volver. Ante este mar de confusión recé a Alá para ver qué era lo que tenía que aceptar, si Jesús que estaba vivo o Mahoma que estaba muerto y no era la Palabra de Dios. Orando, abrí el Corán justo por el capítulo 10, versículo 94: “si tienes alguna duda de lo que te hemos revelado, pregunta a quienes antes que tú, ya leían la Escritura”. Esa Escritura es la Biblia, por lo que el Corán es el que me ha pedido que la lea y la estudie.
5. Para estudiar la Biblia se retira a un centro de retiros y ¿qué pasa después? Porque ahí ocurre un cambio importante en su vida al aceptar a Jesucristo.
Las cosas que iba aprendiendo al estudiar la Biblia me producían una gran alegría: el Corán dice que somos esclavos y que Dios es nuestro amo, la Biblia en cambio dice que somos hijos de Dios. Según el Corán nunca voy a poder obtener el perdón de mis pecados por completo aunque haga mi oración 5 veces al día y pida perdón a Alá, sin embargo, la Biblia dice que puedo obtener el perdón de los pecados a través de la confesión. Según el Corán el cielo es disfrutar de las mujeres y el vino, y según la Biblia el cielo es disfrutar de Dios y ser como ángeles para toda la eternidad. Con el conocimiento de estas cosas tan lógicas y tan maravillosas empecé a enamorarme de Jesús, del cristianismo y de vivir una auténtica vida cristiana. El problema es que el Corán dice que cualquiera que rechace el Islam hay que matarle y hay que luchar contra aquellos que no creen hasta que ellos crean en Alá. Mis padres fueron los primeros que cumplieron esta ley del Corán.
Ellos me torturaron metiéndome en una habitación, golpeándome, echándome polvos picantes en la nariz y en todo el cuerpo haciéndome heridas. Me dejaron sin beber y sin comer durante muchos días. Un día llegó mi padre a la habitación y me agarró del cuello para ver si estaba vivo. En ese momento no podía respirar, pero pude abrir los ojos y le vi enfrente de mí con un cuchillo para matarme. Pensé que si rechazaba a Jesús podía vivir, pero yo no quería hacer eso… Todos tenemos que morir y yo prefería hacerlo por Jesús. Mientras tenía esos pensamientos en mi cabeza, una luz muy potente impactó mi frente y una especie de corriente eléctrica recorrió todo mi cuerpo. Gracias a esto pude empujar a mi padre con la mano que cayó al suelo haciéndose una herida en el pecho con el cuchillo que tenía en la mano. Entonces, mi familia se asustó mucho, lo levantaron del suelo y se lo llevaron al hospital. Con las prisas se dejaron la puerta de mi habitación abierta y yo pude escapar.
Después de mis padres otros muchos musulmanes me han intentado matar pero hasta el día de hoy no lo han conseguido. No sé lo que pasó en mi comunidad después de mi conversión porque no he sabido de ellos, no he tenido noticias… Lo único que sé es que los musulmanes han intentado hacer daño a mi familia después de convertirme al cristianismo.
En el plano espiritual si Dios quiere que sea un mártir estoy preparado para ello, no tengo miedo a la muerte.
6. Y ahora… ¿qué sientes hacia tu familia?
Me gustaría volverme a encontrar con mi familia aunque no creo que suceda porque ellos me han matado en vida, tengo una tumba en mi pueblo natal.
Como ser humano muchas veces siento dolor porque mis padres no están. Hay situaciones con las que sufro: cuando mi hija me pregunta sobre mis padres y no tengo nada que decirle, cuando veo también a los niños con sus padres,… pero realmente son sentimientos humanos normales. Sé que Dios es mi padre, que tengo mi familia en el cielo y eso me consuela.
Este sentimiento que yo tengo no es único. Estoy seguro de que mi madre también lo tiene. Seguro que quiere verme, abrazarme,… pero no le dejan, incluso le pegarían si intenta acercarse a mí. En mi familia hay muchos que sentirán lo mismo que yo.
7. En la actualidad, ¿cómo vives tu fe cristiana?
Vivo mi fe guiado por el Espíritu Santo, que es el que me está llevando, me está guiando, me está forzando a que dé mi fe en público. Es trabajo de él y por tanto lo es de Dios, el de protegerme, por eso no tengo miedo.
Yo tengo una vida familiar feliz: estoy casado con 2 hijas, tengo trabajo, mi mujer también,…Como paso tiempo fuera de casa por mis obligaciones de evangelización me echan de menos, pero el Espíritu Santo me impulsa a hacer esto y soy incapaz de estar en paz si no hago lo que el Espíritu Santo me pide.
8. ¿Tienes algún conocimiento de personas que se hayan convertido con su testimonio?
Después de escribir mi libro, tengo conocimiento de que miles de musulmanes se han convertido y han contactado conmigo a través de las redes sociales y de esos, algo más de 100 se han bautizado, pero hay más que creen en Jesucristo. Incluso los días que he estado en España he tenido el encuentro con algunos musulmanes, y ellos han tenido contacto con Jesús y pueden enamorarse más de Jesús.
9. ¿Cuál es tu pensamiento, tu sentimiento cuando sabes que hay personas que se están acercando a Jesús por tu testimonio?
No siento nada especial. Solamente estoy haciendo lo que el Señor me pide y recuerdo lo que dice Jesús “los que quieran perder su vida por Él la ganarán y los que la quieran ganar la perderán”. Y yo quiero ganar mi vida para toda la eternidad.
Le digo a Jesús que me apoye, que esas almas que han ido al cielo con mi ayuda se acuerden de mí, que sean mi depósito para que yo también vaya al cielo.
10. Una vez que pasa del islam al cristianismo… ¿qué ha cambiado?
Lo más importante es que yo he alcanzado la paz, gracias a que he podido sentir que Dios es mi padre, que soy hijo de Dios y me siento completamente en paz. Es muy difícil en la vida que una persona consiga la paz… los hombres la buscan en el mundo, con una manera equivocada: en el alcohol, con mujeres,… y nunca la encuentran. Sin embargo, yo he encontrado en esta relación con Dios he conseguido buscar la PAZ con él… No tengo de qué preocuparme, no tengo tensiones,… lo dejo todo en sus manos, que me lleve,… y que haga conmigo lo que él quiera.
11. ¿Cuál es su relación con la Virgen María ¿Cómo cambió su relación con la Virgen? ¿Cómo es ahora?
Mi relación con la Virgen María no ha cambiado demasiado. Ya en el Islam la conocía, mi madre me había hablado de ella, la tenía como intercesora y yo también. Quizá mi relación ahora es más profunda porque la conozco y la quiero más, le pido y la necesito más.
12. Su nombre de ahora, Mario, ¿es por la Virgen María?
Cuando me bauticé me aconsejaron que cogiera el nombre de un santo para que me protegiera y pensé que el santo entre los santos es la Virgen María. Pero me dijeron que no era posible coger el nombre de la Virgen María porque es un nombre de mujer. Yo investigué y me di cuenta de que existía un nombre en masculino que es Mario, entonces me puse muy contento y lo elegí. Y de segundo elegí a S. José y así, tengo a María y a S. José como intercesores.
13. Supongo que la Biblia es muy importante para ti ya que muchas respuestas del Corán están en la Biblia y tu conversión viene a raíz de buscar en la Biblia, pero ¿qué es la Biblia y cómo la vives?
Para mí la Biblia lo es todo, sin la Biblia no sabría cómo vivir cristianamente. Desde el Génesis hasta el Apocalipsis está dicho todo y no sería capaz de amar a Dios, ni de saber cómo orar… Gracias a la Biblia conozco todo y puedo ser una persona espiritual. Con la Biblia hay cosas muy importante que yo aprendo, una de ellas son las promesas, las bendiciones que tiene Dios para nosotros. Otra es los pecados que otros han cometido, los errores y eso me enseña a aprender para no cometerlos yo y otra cosa es qué pecados que yo cometo, la Biblia también me muestra qué hago yo mal y cómo puedo corregirme. Entonces me ayuda en todo.
La Biblia es como una farmacia, cada versículo de la Biblia está indicado para un problema que el ser humano pueda tener. Si uno sabe cómo utilizar esa farmacia tiene todo allí. La espiritualidad de un hombre se basa en dos cosas fundamentalmente: en seguir la Biblia y en tener los sacramentos. Si tienes estas dos cosas es como tener comida y agua, son las dos cosas imprescindibles para el hombre espiritual.
Si tú solamente sigues la Biblia y no te interesas por otras cosas se te va atragantar la comida, necesitas los sacramentos para que pueda entrar la palabra de Dios. Los protestantes no lo hacen, pero los católicos sí.
14. Danos un mensaje para todos aquellos que vayan a leer esta entrevista, por ejemplo, ahora mismo en España no hay persecución religiosa de que nos vayan a matar, pero sí otro tipo de persecución como es la vergüenza, no nos animamos a hablar de Jesús o a decir que somos cristianos simplemente porque vamos a quedar mal… Un mensaje con su ejemplo…
Después de llegar a España, estaba yo un día orando en mi habitación a las 3 de la mañana y el Señor me dio una palabra para los españoles, una palabra del apocalipsis capítulo 2, versículos del 2 al 4. En ella dice: “vosotros habéis trabajado muy duro para mí, habéis sufrido mucho por mí pero yo ahora tengo una pequeña queja contra vosotros, vosotros habéis perdido ese amor primero que me teníais, volver hacia mí…"
España ha trabajado mucho para hacer de ella un país católico, para que la Iglesia crezca y también a otros países de habla hispana ha llegado el Evangelio, pero ahora mismo España se está secando, se está destruyendo el trabajo de vuestros antepasados. Tenemos que llegar a los jóvenes y mostrarles el amor de Dios y darles esa pasión, esa fuerza, ese conocimiento de lo que Dios les ama para hacerles volver a renacer la fe en España.
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