El camino de la vida: Prólogo

nº 1, por Alfonso González, médico de familia.

En esta primera entrada al blog intentaremos realizar un pequeño esbozo de lo que nos proponemos en esta sección.

El propósito esencialmente consiste en intentar hacer ver cómo una vida vivida en plenitud no es otra que en el fondo una vida de santidad, es decir, una vida de virtudes, teologales y morales. Y que esta vida, vivida en el continuo crecimiento de la virtud, es la vida realmente humana, la que "nos hace personas", y no solo eso, sino la que hace que podamos tener una adecuada relación con el resto de la humanidad, la que coloca cada cosa en su sitio y procura ese orden que tiene que haber en la vida, y sobre todo la que se orienta a la eternidad, porque olvidando este aspecto de la vida de todo hombre nos olvidamos de querer mejorar.

Hablaremos de virtudes, hablaremos de sentimientos y emociones, hablaremos de personalidad, hablaremos de educación y formación del carácter, hablaremos de temas de actualidad, hablaremos de muchas cosas, y sobre todo intentaremos hacer ver cómo Cristo es la única Luz que puede iluminar todas las facetas y problemas del hombre, y que sin esa luz todo queda un poco incomprendido, como sin respuesta...

En cada entrada, no pretendo agotar cada tema, eso sería imposible, simplemente aspiramos humildemente, a ser como los primeros rayos de la aurora de la mañana que comienzan a iluminar el horizonte. Además, me comprometo a ser breve, porque como dice el refrán "lo bueno si breve, dos veces bueno", así que, al menos me comprometo a cumplir la segunda premisa, la de la brevedad.

No pretendemos, en ningún caso realizar un trabajo científico, todo lo contrario, son notas para, como vulgarmente se puede decir "de andar por casa", para que cualquiera que se acerque a la sección pueda comprender, pueda entender sencillamente, incluso pueda preguntar.

Y para finalizar, en todo lo dicho, espero ser fiel al Magisterio de nuestra Madre la Iglesia, para lo cual espero que los responsables eclesiásticos del blog realicen antes de que sea subido, la adecuada revisión de los textos, y si en algo puedo sin querer "meter la pata" pueda ser corregido, para asegurar sana doctrina a todos los lectores, y poder contribuir a la salvación de todas las almas.