"El caballo de Troya en la Ciudad de Dios", Dietrich Von Hildebrand
Nº 2 por Manuel García, sacerdote
Este mes repetimos autor pero esta vez con un tema totalmente distinto. Si en su libro “El corazón” Von Hildebrand analizaba la esfera de los afectos humanos, ahora dedica 283 páginas a desenredar la madeja de falsas teorías, interpretaciones erróneas y confusiones que durante años se propagaron después del Concilio Vaticano II.
En efecto, justo después del último Concilio, celebrado en Roma en 1960 y culminado en 1965, una gravísima crisis de fe asoló la Iglesia. Durante décadas se dieron en las facultades de teología enseñanzas que contradecían la doctrina de la Iglesia, así como la manera de interpretar la Sagrada Escritura, la Tradición, la liturgia y temas tan importantes como la revelación, la redención, la persona de Cristo, los sacramentos o la concepción cristiana del hombre. Temas todos de una importancia capital para nuestra fe católica que fueron objeto de profundas desviaciones no en el magisterio de la Iglesia sino en la interpretación que de éste hacían muchos autores aún algunos de destacado renombre.
Esta crisis de fe produjo, como no podía ser de otra manera, una crisis de la existencia cristiana llevando a la secularización de una sociedad que todavía se consideraba y estaba enraizada en la religión católica. La crisis fue gravísima y no menos grave las consecuencias para la sociedad y para personas concretas cuya fe se vio de repente puesta en tela de juicio.
El autor desenmascara las confusiones y apostasías de aquellos autores que se proclamaban auténticos intérpretes del Concilio Vaticano II pero que en lugar de seguir sus enseñanzas atribuían al Concilio criterios y doctrinas que el Concilio no dijo y no quiso decir.
Es un libro, como dice el autor en el prólogo, “dirigido a todos los que aún tienen conciencia de la situación metafísica del hombre, a todos los que han resistido los lavados de cerebro que los “slogans” secularistas quieren hacernos, a todos los que aún tienen ansias de Dios y que siguen siendo conscientes de la necesidad que tenemos de redención. Este libro se dirige a todos los que todavía no se han hecho sordos a la voz de Cristo en medio del griterío chillón de fórmulas baratas y de relumbrón, a aquellos cuya mente no está hechizada por la supuesta llegada de la era del hombre moderno, a todos los que no se han dejado arrastrar por el torbellino de la moderna crisis de pubertad. Este libro trata de hablar a todos los que aún tienen el sentido de la verdadera profundidad, el sentido de la verdadera grandeza”.
Temas como el matrimonio, la relación entre Dios y el hombre, la ciencia y la fe, el evolucionismo, la autoridad, el valor del amor humano, el relativismo, la libertad, el valor de lo sagrado, la amoralidad o la secularización de nuestra sociedad tienen cabida en este libro. Analiza, por tanto, desde una perspectiva católica los numerosos errores en los que cayó no sólo la sociedad contemporánea sino también parte de la eclesial.
Un libro interesante, donde no sólo saca a la luz las desviaciones que se han dado en materia de fe, sino que muestra brillantemente cual es camino por el que la sociedad debe reconducirse para recuperar una concepción cristiana del mundo, del hombre y de su historia.
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